domingo, 7 de agosto de 2022

DISFRUTÓN

 

Disfrutón. Tinta y lápices, JBL 2022

No comprende este espectador incansable a los nostálgicos del pasado..., cuando la tele solo tenía dos cadenas que se veían, con nieve amortiguada por papel celofán..., esos que echan de menos la radio de otros tiempos o los periódicos de papel. A DISFRUTÓN le parece tener una suerte bárbara viviendo en un país tecno-desarrollado y telecomunicado en el que cualquiera, gracias a la Magna Malla Mundial (WWW), puede acceder a información y entretenimiento infinitos.

¡Esta es también la angustia de DISFRUTÓN! Lee y oye aquí y allá en los monitores de la tele, en el aipad y en el esmartfon: "¿Te lo vas a perder?", "¿te lo vas a perder?", etc. La pregunta recalcitrante le desespera. ¡Tánto se le ofrece, que no halla tiempo para tanto! Y se agobia con la sensación de que siempre se pierde lo mejor.

Por ver lo que puede y no perderse lo que le gusta, ya no socializa. Aislado en la Iconoesfera, canalea y salta de una emisora a otra, de una web a un blog, hasta vagar por los bajos fondos poblados de virus apestosos... Deja las series truncadas por no perderse la novedad recomendada por Google News, y por eso ningún relato adquiere sentido y en la mente se le confunden unas historias con otras, en un caos por el que se hunde y sufre vértigos.

Podemos concluir -con poco margen para el error- que, a pesar de su optimismo incurable por confuso o mal informado, DISFRUTÓN disfruta ya poco y goza menos. No quiere abandonar el barco sin probarlo todo, ¡espectador insaciable! Pero no saca gusto a nada.

Perdió el sueño por estar al día y perdió el día por catar y disfrutar ensueños de otros.