¡Bien por Chamizo! El Defensor del Pueblo Andaluz les echó un rapapolvo a los políticos el martes 19 de junio al presentar su informe anual ante el Parlamento.
Él mismo presentó su intervención como un exabrupto. Y es cierto que los políticos le podrían haber objetado que también él, y su cargo, es político. Pero el desahogo vale: "la gente está muy cabreada con ustedes -les dijo-, no sé si lo saben. Está muy enfadada porque los ven todo el día en la peleíta. La gente está hasta el gorro de todos ustedes. No sé si puedo decirlo con todo el cariño del mundo".
La "peleíta" es, obviamente, le lucha partitocrática del "salte tú que me meta yo y saca a los tuyos para que yo meta a los míos"... Al parecer, el verdadero cabreo del cura Chamizo tiene que ver con los adjuntos que le nombran los partidos y que aprovechan la información privilegiada de la atalaya de la "Defendeduría populi" -si me permiten la expresión- para hacer incesante campaña. Chamizo dice que echa más tiempo controlando a los adjuntos que defendiendo al pueblo.
La bronca del peculiar sacerdote gaditano no ha sentado nada bien a los políticos de "la peleíta"... El que se pica ajos come..., al que le huele el aliento a ajo, ajo ha comido. Lo que les pide José Chamizo es buena voluntad para resolver problemas. La bondad de la voluntad, ¿está más allá del oportunismo político? Creo que sí. La ética... subsume a la política, ¿o tenía razón Maquiavelo? ¿Saben nuestros políticos qué es la buena voluntad o -como epígonos inconscientes de Nietzsche-, sólo saben lo que es la voluntad de poderío?
Los del Psoe, los del PP, los de IU, ¡todos se levantan contra Chamizo!, incluso han pensado en mandarle una nota recordándole que su cargo es político y está subordinado al Parlamento Soberano. Vieja polémica liberal: ¿es el parlamento o la cámara legislativa el Soberano, o es el pueblo quien delega condicionalmente su soberanía inalienable al parlamento? Rousseau no hubiera dudado. El mandato del político es provisional, ¡no profesional! Y el Pueblo Soberano puede revocarle en cualquier momento.
Políticos somos todos, y la mayoría estamos ciertamente "hasta el gorro" de "la peleíta", de que los políticos tengan tan mala educación que no sepan entenderse para resolver problemas, de que los creen en lugar de solucionarlos, de que se gasten dineros en peleas y contenciosos entre administraciones, de que los entes públicos sirvan para colocar adláteres en lugar de ofrecer verdaderos servicios públicos, de que se escatime en limpieza, educación y sanidad, en lugar de adelgazar el profesionalismo de los partitócratas...
Por eso los "políticos de profesión" han descartado actuar públicamente contra Chamizo. ¿Por qué? ¡Porque son conscientes de que la gente se pondría del lado de Chamizo! Y lo que importa es la gente, ¿o no? Esa que está "hasta el gorro" de todos los partidos...
Que era lo que el pater afirmaba... Quod est demostrandum.